10 de agosto de 2015
La cooperación de los próximos tres años en Colombia: Entre paz y desarrollo
El 3 de agosto de 2015, la Agencia Presidencial de Cooperación Internacional de Colombia (APC-Colombia) presentó lo que denominó la nueva Hoja de Ruta de la Cooperación Internacional en Colombia 2015-2018. Una breve guía que señala las prioridades del país en materia, tanto de demanda como de oferta de cooperación durante los próximos años.
El 3 de agosto de 2015, la Agencia Presidencial de Cooperación Internacional de Colombia (APC-Colombia) presentó lo que denominó la nueva Hoja de Ruta de la Cooperación Internacional en Colombia 2015-2018. Una breve guía que señala las prioridades del país en materia, tanto de demanda como de oferta de cooperación durante los próximos años. Esta propuesta responde a los intereses de política interna y externa del gobierno de Juan Manual Santos, pero, ¿sí responde de manera integral a las necesidades del país?
El discurso alrededor de la cooperación
La Cooperación Internacional para el Desarrollo (CID) siempre ha sido un importante instrumento para la consecución de políticas a nivel interno, como por ejemplo de lucha contra la pobreza, construcción de la paz, formulación de políticas encaminadas a mejorar el acceso y la calidad de la educación, la igualdad de género (en especial todo lo que tenga que ver con el respeto a los derechos de las niñas y de las mujeres), desarrollo sostenido y productivo, entre otras.
Por lo cual, países como Colombia (de renta media alta) buscan seguir accediendo a recursos provenientes de la cooperación internacional, que les permitan fortalecer la ejecución de sus políticas. Para ello, trabajan constantemente en la consolidación de alianzas estratégicas, para alinear lo que los donantes quieren dar (lo que en cooperación se conoce como líneas de cooperación) con lo que los receptores necesitan. Lo anterior, por ejemplo, ha llevado a Colombia a construir diversos discursos sobre sus necesidades con el fin de convertirse en un país más atractivo para acceder a la ayuda, bien sea técnica o financiera (reembolsable o no).
Gobierno tras gobierno, los discursos políticos para justificar la necesidad de contar con mayor ayuda se han venido acomodando. Los casos más extremos han sido los de los presidentes Álvaro Uribe y Juan Manuel Santos. El primero, apoyado por un discurso internacional de lucha contra el terrorismo, logró contar con el apoyo de los cooperantes para trabajar de manera mancomunada en el desarrollo de políticas sociales de su gobierno, mientras que éste perseguía y combatía a la guerrilla.
En cuanto al presidente Juan Manuel Santos, sus discursos evidencian su interés por construir un país en paz y más desarrollado, un país que no sólo busca recibir cooperación sino también darla. Para lograrlo, necesitará contar con mayores recursos de cooperación internacional, lo que parcialmente motivó sus viajes por Europa durante el 2014 y parte del 2015; en ese sentido, la Hoja de Ruta de la Cooperación Internacional en Colombia 2015-2018, se alinea con el nuevo discurso en materia de cooperación en el país. Alcanzar estos objetivos dependerá de varios factores: de la efectividad de su equipo para ejecutar el plan, pero sobre todo de la coyuntura nacional, es decir, del avance de las negociaciones de paz; también dependerá del escenario internacional que, en diversas ocasiones, ha afectado las estrategias de cooperación del país (como cuando ocurrieron los atentados del 11 de septiembre de 2001).
Colombia y su nueva ruta para el desarrollo
Esta nueva hoja de ruta presentada por APC-Colombia, señala el interés de esta entidad por servir como instrumento del gobierno nacional para alcanzar las metas a nivel interno y externo. En cuanto a la política internacional, Colombia busca mejorar su posicionamiento en este ámbito y desarrollar una política más dinámica y visible; así mismo busca lograr su ingreso a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) y convertirse en referente en materia de Cooperación Sur-Sur en la región latinoamericana.
En cuanto a su política interna, tal como lo señala el Plan Nacional de Desarrollo 2014-2018 Todos por un nuevo país, el objetivo es “construir una Colombia en paz, equitativa y educada”. Para ello debe alinear su política interna a los objetivos de desarrollo post-2015, que reemplazarán durante los próximos 15 años los objetivos del milenio.
Para responder a lo anterior y fortalecer su rol como coordinador técnico de la CID del país, APC-Colombia diseña su estrategia con base en dos grandes objetivos:
- Focalizar y dinamizar la Cooperación Internacional que recibe Colombia. Para ello ha priorizado tres áreas temáticas:
- Construcción de paz: en el marco de las negociaciones de paz que se adelantan en La Habana, esta se vuelve una línea fundamental para el fortalecimiento de los compromisos que se señalen tras la firma del tratado. Se incluyen dentro de este propósito todos aquellos proyectos encaminados a apoyar la labor del gobierno en temas de reinserción y reintegración (justicia transicional, reparación integral de victimas del conflicto, restitución de tierras y desminado y fortalecimiento de la memoria histórica).
- Desarrollo rural y sostenible: según el informe del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) Objetivos de desarrollo en Colombia (2014), 6 millones de personas han salido de la pobreza en los últimos 11 años. Sin embargo, la lucha contra la pobreza ha sido desigual y la brecha entre lo rural y lo urbano persiste. Sólo por mencionar un ejemplo, el 40% de los municipios del país no tiene alcantarillado en pleno funcionamiento. Por lo tanto, dentro de esta estrategia, APC-Colombia sostiene que busca apoyar proyectos que se encaminen a reducir la pobreza y las desigualdades entre campo y ciudad, a través de la generación de alterativas de desarrollo productivo.
- Conservación y sostenibilidad ambiental: al ser Colombia un país megadiverso, el tema ambiental siempre ha estado presente en la agenda del país como algo importante, más no prioritario, ligado en especial al interés de los donantes. Si se analizan las líneas de cooperación de las distintas agencias de cooperación en el país (bien sea porque tienen oficina o trabajan en proyectos acá), se puede observar que es un tema recurrente, tanto de ayuda bilateral (Alemania, Bélgica, Canadá, Corea, Finlandia, Japón o Suiza) como multilateral (BID, PNUMA, Grupo del Banco Mundial), para el cual existen grandes recursos de cooperación.
Dentro de esta línea, los proyectos que la hoja de ruta señala son aquellos vinculados a: reforestación, conservación y adaptación al cambio climático así como al uso sostenible de las riquezas.
- Compartir conocimiento de alto valor para apoyar la política exterior del país, al mismo tiempo generar beneficios tangibles para el desarrollo de Colombia y los socios en Cooperación Sur-Sur y Cooperación Triangular.
Objetivo que responde a lo ya establecido dentro de la Estrategia Nacional de Cooperación Internacional 2012-2014 (ENCI) en el desarrollo de nuevas modalidades de CID.
¿Qué esperar de esta nueva estrategia?
A nivel internacional, cada vez los retos para atacar los males públicos globales van a mayor velocidad respecto a la respuesta de la comunidad internacional; por ello, la cooperación debe servir para dar soluciones a través de la formulación de grandes proyectos como los objetivos del milenio o los de desarrollo post-2015, o través de la diplomacia preventiva.
En algunos debates académicos es usual oír duras posturas sobre el futuro de la cooperación y lo costosa que ha sido, pero afortunadamente son más las opiniones que señalan que la cooperación internacional como instrumento para el desarrollo sigue siendo un elemento clave que debe tratar de diseñarse y adaptarse de manera más rápida a los distintos desafíos para poder ser más eficaz.
Por lo tanto, seguir hablando de cooperación internacional es necesario, en especial en países como Colombia que aún no cuentan con la capacidad financiera ni institucional para hacer frente a sus enormes problemas sociales por sí solo.
Para los próximos 15 años será necesaria la construcción de nuevos discursos que ayuden al país más desigual de América Latina (según datos del Banco Mundial el coeficiente de GINI para Colombia es 0,53 –siendo 0 la situación más igualitaria y 1 la más desigual–), a disminuir la brecha entre ricos y pobres, entre campo y ciudad. Si bien es necesario aprovechar mejor los recursos a través de proyectos que generen mayor impacto, también es fundamental el fortalecimiento de las instituciones para una mejor gestión.
Seguramente estos objetivos y las áreas temáticas identificadas no respondan a todas las necesidades del país y no tendrían por qué hacerlo; finalmente el rol de la cooperación es el de complementar, fortalecer, apoyar las acciones del gobierno, mas no el de remplazarlas. Por lo tanto es una estrategia integral que se equilibra con los objetivos en materia de política exterior y de política interna del gobierno de turno; el reto verdaderamente importante es en darles continuidad más allá del 2018.